Katharine Hepburn fue una mujer famosa por su papel en el cine. Con ni más ni menos que 4 Oscar y 12 nominaciones a mejor actriz, Hepburn supuso un antes y un después en el papel de la mujer en el cine. Lo que muchos no saben, pero, es que también se hizo famosa gracias a una de sus recetas: los brownies de Katharine Hepburn.
La historia detrás de los brownies de Katharine Hepburn
El julio de 2003 se publicó en The New York Times la famosa receta de los brownies de Katharine Hepburn. Y no fue ella quien los publicó, sino Heather Henderson, quien fue su vecina, en una carta al editor.
Después de la muerte de Hepburn, Heather Henderson escribió al periódico para contar cómo consiguió la receta de Katharine. La historia fue así: el padre de Heather un día se atrevió a pedirle a Hepburn que orientase a su hija ya que ella quería dejar la Universidad. Heather estudiaba en Bryn Mawr College, la misma Universidad donde estudió Katharine. Ella la animó a seguir con sus estudios y a nunca rendirse.
Más tarde, el padre de Heather se enteró que Katharine se estaba recuperando de un accidente de coche. Decidió llevarle unos brownies caseros. Katharine los probó y dijo que estaban secos, que se debían hacer con menos harina. Así fue como Hepburn les dio su receta de brownies.
Podéis leer la carta entera de Heather Henderson publicada en The New York Times (en inglés) el 6 de junio de 2003.
El truco de Katharine Hepburn: poca harina y horno bajo
Cuando Katharine probó los brownies del padre de Heather Henderson dijo:
“¡Demasiada harina!”
Este es uno de los trucos para que los brownies no queden secos, sino todo lo contrario: húmedos y suaves por dentro. Y al darle su receta de brownies añadió:
“¡Y no los hornees demasiado! ¡Deben quedar húmedos y no resecos!”
Así que los dos trucos de la receta de brownies de Katharine Hepburn son no pasarse con la harina (ella pone unos 35 gramos) y cocerlos el tiempo justo a baja temperatura (165 ºC).
¿Qué tienen de peculiar los brownies de Katharine Hepburn?
Siguiendo los dos trucos de Katharine lo que conseguimos son unos brownies húmedos por dentro. La textura es muy agradable. Quedan unos brownies compactos pero llenos de humedad.
A nosotras nos gusta mucho esta receta porqué, además, al no haber demasiada harina el total protagonista es el chocolate! 😛
- 2 huevos
- 65 g de mantequilla
- 50 g de cacao puro
- 180 g de azúcar
- 35 g de harina
- Un pellizco de sal
- Un puñado de nueces (opcional)
- Lo primero que debes hacer es precalentar el horno a 165ºC.
- Seguidamente, funde la mantequilla y mézclala con el cacao puro hasta que quede una mezcla homogénea. Espera a que se enfríe un poco.
- Añade los dos huevos, uno a uno, a la mezcla de cacao y mantequilla. Bátelo hasta que queden integrados.
- En otro bol, añade la harina, el azúcar y la sal. Añade también las nueces troceadas.
- Mezcla los ingredientes secos junto con la mezcla de chocolate. Mézclalo bien para que quede homogéneo y no haya grumos. ¡Ya tienes la masa de brownies hecha!
- Añade la masa de brownies en un molde cuadrado de unos 20 x 20 cm.
- Hornéalo durante 30 minutos a 165 ºC.
- ¡Listo! Disfruta de los auténticos brownies de Katharine Hepburn